lunes, 19 de abril de 2010

Bajo el Sol de la Toscana

¡Buenas a todos!

Este comentario me parece que va a ser uno de los que más me va a costar, ¿por qué? Pues porque tengo que dar mi opinión acerca de la actitud de la protagonista de la película Bajo el Sol de la Toscana, filme que estamos viendo en las clases de Proyecto Integrado. Claro, mucha gente dirá que eso no tiene nada de complicado, ya que lo único que se me pide es dar mi opinión, pero, no es fácil ponerse en la situación de la mujer, sobretodo si no has vivido algo igual o al menos parecido.

Antes de nada, voy a hacer una pequeña introducción de la película, sobretodo para aquellas personas que no la hayan visto.

Frances es una escritora de 35 años que se acaba de divorciar de su marido, ya que este le ha sido infiel. Ante esta situación, su amiga le regala un viaje a la Toscana italiana para que desconecte y se recupere. A pesar de que en un principio se negó rotundamente, Frances acabo aceptando. Ya en Italia, la protagonista se deja llevar por un impulso y compra una casa, hogar que tendrá que reformar por completo porque está bastante deteriorado.
Cuando la compra parece muy convencida, pero luego le entran las dudas… aunque sigue hacia delante con las reformas.

En mi opinión, la idea de cambiar de aires para olvidarse de todo me parece bastante acertada pero, la de comprar una casa, quizás sea una buena elección, pero yo no lo haría. Dejaría demasiadas cosas atrás. Me podría llevar semanas, meses fuera de mi ciudad para recomponerme, pero cambiar así como así de residencia, no me parece la elección más acertada. Los problemas muchas veces los buscamos, otras veces nos vienen solos, pero siempre que no se trate de la muerte, hay una solución, y para mí ésta no es la adecuada.

Claro está, que cada persona es un mundo y que yo no me he visto en esa situación. Quizás si pasara por el calvario por el que está pasando ella actuaría igual, pero yo soy más de estar con las personas que realmente me quieren en los momentos difíciles, que de emanciparme sola para olvidarlo todo.
Es que esa no es la solución para mí. Todo no hay que olvidarlo, ni siquiera todo en relación con el que te ha hecho daño. Seguro que ella tendría momentos buenos con su marido hasta que él hiciera esa desagradable acción. Lo único que hay que olvidar es el daño que te hizo, y para mí la única manera que existe de llevar esto a cabo es rodearte de tus seres más queridos, para sustituir ese daño por amor.

Además, si nos damos cuenta de esto, podremos ver como en este caso en concreto, seguro que hay otra oportunidad de ser feliz junto a alguien que la quiera de verdad.

Las oportunidades las buscamos nosotros mismos: ella ha decidido intentar ser feliz trasladando su vida a otro lugar muy distinto, y yo, hubiera optado por quedarme en mi ciudad, con mi familia y amigos, y concentrar todas mis fuerzas en darme cuenta que me merezco alguien que me quiera y en confiar en que puedo encontrarlo.

Dicho esto, sólo me queda resaltar que solo es mi OPINIÓN y que para hablar bien de este tema, creo que debes vivir algo similar.

¡Buenas tardes y hasta la próxima semana!

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